La historia oficial, 1985
Luis Puenzo
Argentina

¿Por qué la elección?
Didi Huberman afirma que así como el horror paraliza, su reflejo y su reconducción en imágenes puede ser una activa fuente de conocimiento. Y es cierto; leída incluso 40 años después, La historia oficial sigue siendo una reconstrucción del horror que abunda en lecciones. Esta película es símbolo y metáfora no sólo de la historia política de un país, sino de la historia de las relaciones de género que la acompañan y, hasta cierto punto, la sostienen. Detrás de la toma de conciencia de Alicia –y con ella de las clases medias argentinas– de su complicidad con el horror, está la no menos inquietante y plenamente vigente prueba de la subordinación que impera en las estructuras familiares tradicionales.
La historia oficial es la historia de la apropiación de hijos de mujeres desaparecidas durante la dictadura argentina de 1976 y del entramado de instituciones que la apoyaron. Y, lo que nos interesa especialmente subrayar acá, es que esa historia pudo ser oficial entre otras cosas por la reducción e infantilización de la conciencia de las mujeres dentro del esquema de sometimiento –con o sin violencia– que gobierna a la familia patriarcal.
Ficha técnica