The Seed of the Sacred Fig, 2024
Mohammad Rasoulof
Irán

¿Por qué la elección?
El avasallamiento viene, por lo general, de la mano de una figura con poder y fuerza. Con frecuencia es un hombre déspota, dotado de fuertes atributos personales, el que somete y domina. Menos frecuente es ver a la debilidad ejerciendo el poder, al patetismo practicando la tiranía y manteniendo el control. La paradoja de ver a este ser lamentable y ridículo, a este padre –incapaz y dependiente como un hijo menor– subyugando y torturando hasta lo indecible a su familia solo puede ser explicada mirando de cerca el sistema social y político de la teocracia patriarcal iraní. Es esto precisamente lo que hace Mohammad Rasoulof en The Seed of the Sacred Fig.
Iman, esposo y padre de dos hijas, es investigador del Tribunal Revolucionario de Teherán, del que es nombrado juez. Su incipiente gestión viene acompañada de una creciente paranoia. No solo no tiene ninguna libertad para juzgar con su criterio –ya que las sentencias le son ordenadas por sus superiores–, sino que se siente amenazado y perseguido por ser la voz que ordena la ejecución de cientos de personas en el contexto de las protestas de mujeres de 2022. Su paranoia llega a un punto tal que desconfía de su propia familia y la somete, esta vez sí según su propio criterio, a terribles interrogaciones y torturas.
Algo está fuera de control en Irán, parece decir Mohammad Rasoulof, un país, que al igual que su lastimoso juez protagonista, asiste al derrumbe de su autoridad patriarcal y parecería solo poder contar con la fuerza indiscriminada para contener la quizás incontenible resistencia de las mujeres.
Ficha técnica