
El Libertador Simón Bolívar, 1993
Juan Dávila
Chile
¿Por qué la elección?
“Mis pinturas tratan de proponer una mirada a lo que hoy es reprimido como lenguaje: las experiencias compartidas, éxtasis innombrables, ambigüedad, valores heterogéneos que no se pueden unificar, narrativas y goce”, dice Juan Dávila (1946), cuya obra pictórica cuestiona los discursos hegemónicos alrededor del colonialismo, la religión, la sexualidad, la raza y el género.
Acuarelas, carteles y pinturas son algunos de los formatos que utiliza para representar a los marginados de la sociedad y posicionarlos, con ironía y sarcasmo, en el centro de algunos de los símbolos más significativos del poder patriarcal.
El Libertador Simón Bolívar, mestizo y femenino, como lo describe Dávila, despojado de su masculinidad y de su raza, es convertido en un antihéroe capaz de subvertir el relato oficial de las naciones latinoamericanas. En efecto, a la ambigüedad sexual de su representación de este héroe de la independencia, se suma su subversión racial y el desclasamiento del prócer y de la historia hegemónica.
Ficha técnica
