Cabaret, 1972
Bob Fosse
Estados Unidos

¿Por qué la elección?
Berlín, 1931. El partido nazi está en ascenso, pero la ciudad vive aún algo de libertad y progresismo. El club Kit Kat es el epicentro de las disidencias sexuales y el hedonismo. Aquí todo está permitido. Entre espejos, bailarinas, una orquesta extravagante, y el humo que carga el ambiente, la peculiar figura del maestro de ceremonias guía a los espectadores por un recorrido musical, asegura que la audiencia se mantenga entretenida y pueda disfrutar de un espacio donde escapar de la creciente tensión que vaticina el nazismo. Es en este oasis, Sally Bowles despliega sus dotes como cantante, aunque su aspiración es llegar a ser una reconocida actriz.
Sally es una expatriada norteamericana viviendo una vida de excesos y promiscuidad en Berlín. Por azar conoce a Brian, un escritor y académico inglés que buscaba hospedaje en su hogar y desde allí comienza a dar clases de inglés mientras termina su doctorado. Ambos personajes entablan una profunda conexión que desdibuja los límites entre la amistad y el noviazgo. Juntos atraviesan todo tipo de aventuras y exploraciones que evidencian el carácter fluido de la sexualidad de Brian. Cuando Sally le comenta a Brian que está embarazada y no sabe quién es el padre, él decide hacerse cargo y le propone volver a Inglaterra para criarlo. Sally se conmueve con la oferta, pero tras una visión de su futuro como ama de casa, decide abortar. No quiere renunciar a su vida en el cabaret y a su carrera como actriz. Ambos terminan teniendo una conversación franca y honesta en la que ponen sobre la mesa sus expectativas y deseos y cada uno opta por rumbos separados.
Subrayada con una exquisita puesta en escena y fotografía y enmarcada en números musicales y coreográficos que, a la manera un coro griego contemporáneo, comentan lo que los personajes experimentan, la trama de Cabaret toca temas tabúes sin teñir el relato de moralismo. La película abraza la diversidad sexual, el aborto como decisión de autonomía femenina y la promiscuidad sexual desde una perspectiva libre de prejuicios. Bob Fosse cristaliza, en este clásico, un punto de vista inclusivo en un momento histórico, que aunque políticamente dramático, se despojaba de valores anquilosados para dar lugar a una mayor apertura.
Ficha técnica