
Autoportrait au chapeau de paille, 1782
Élisabeth-Louise Vigée-Le Brun
Francia
¿Por qué la elección?
Élisabeth-Louise Vigée-Le Brun (1755-1842), pintora emblemática de la Francia del S. XVIII, fue una de las retratistas más reconocidas y demandadas de la época, siendo la pintora de la monarquía francesa antes de la revolución, y de la nobleza e intelectualidad europea durante y años después de la misma.
Su formación inicial estuvo a cargo de su padre, pero este muere cuando ella tiene 15 años y acaba forjándose fundamentalmente como autodidacta dada la dificultad que tenían las mujeres de acceder a la academia. Su carrera e independencia arrancan ahí y empieza a vivir de su arte. Logra también, de forma excepcional, ser miembro de la Academia Real de Pintura y Escultura con la obra alegórica La paix ramène l’abondance. Pero será el retrato, y particularmente el retrato femenino y el autorretrato, su género principal. Su particular estilo cautivó a María Antonieta, una de sus más adeptas modelos. En Marie Antoinette in a Chemise Dress desmarca a la reina del modelo fastuoso del retrato cortesano francés, presentándola con un gesto tranquilo y un atuendo cotidiano.
Respecto a la imagen de sí misma, en Autoportrait au chapeau de paille, inspirado en un cuadro de Rubens, se proyecta segura, mirando de frente y sosteniendo los implementos de su oficio como pintora. En Madame Vigée-Lebrun et sa fille se retrata en un abrazo entrañable con Julie, su única hija. Su belleza resultaba para algunos coetáneos la razón de su éxito, y la representación de la maternidad el objeto de crítica en el S. XX. Vigée-Lebrun construyó su carrera artística bajo el pleno dominio masculino de los siglos XVIII y XIX, ¿qué condiciones debería haber sumado y cuáles debería haber suprimido para pasar la prueba como artista frente a las críticas machista y feminista? Para Vigée-Lebrun su ser femenino y su ser artístico no supusieron una contradicción.
Ficha técnica

Madame Vigée-Lebrun et sa fille, 1789
