¿Por qué la elección?

La auto representación en la obra de Nahum Zenil (1947) funciona como estructura. En sus imágenes se casa consigo mismo, tiene hijos con su cara; representa objetos, órganos y santos que son autorretratos.

Zenil, un artista central en las reivindicaciones del colectivo LGBTQI+ en México, creó un universo visual en el que reinterpreta eventos importantes del catolicismo o de la historia mexicana desde la postura de un hombre gay y latinoamericano. Corporeidad, identidad sexual, familia y erotismo se entrecruzan en su producción buscando cuestionar los preceptos que sostienen la identidad nacional y su estrecha relación con la religión.

En Yo y yo, al representarse casado consigo mismo, expone la marginalización de las diversidades en una sociedad fuertemente religiosa; manifiesta la exclusión y limitación de sus derechos civiles al tiempo que problematiza los modelos masculinos que impone el patriarcado. En el autorretrato no solo reafirma su identidad, también cuestiona la heteronormatividad: si el vestido es el elemento característico asignado al género femenino, Zenil lo utiliza como una herramienta para jugar a travestirse y presentar nuevas maneras de percibirse. Del mismo modo, si el matrimonio es un acontecimiento vedado para algunas personas, él se representa casado.

La repetición de su autorretrato es la repetición de su afirmación en las diversas identidades que son rechazadas por el discurso nacional y el religioso.